[RESEÑA] Sueños de Piedra | IRIA G. PARENTE & SELENE M. PASCUAL

Título: Sueños de Piedra.

Autoras: Iria G. Parente y Selene M. Pascual.

Editorial: Nocturna Editorial.

ISBN: 978-84-943354-7-1
Año: 2015

Páginas: 573

Precio: 16,50€.

Érase una vez un reino muy, muy lejano donde un príncipe premió a un mago por ayudar a rescatar a una joven en apuros. Encantador. Lástima que nada de esto sea verdad.En realidad, el príncipe sueña con gloria y venganza; el mago, con que sus hechizos no sean siempre un desastre y la joven en apuros, con huir de un pasado que la atormenta... y del recuerdo del hombre al que ha matado. Érase una vez...

Me hacía mucha ilusión leer este libro, en parte porque ya había leído otra obra de las autoras, y porque las críticas ponían el libro por las nubes y sabiendo cómo son ambas sobre todo porque tienen mucho contacto con sus lectores por las redes sociales, me sumergí en esta historia.

Dibujo de Lehanan Aida.

Al principio se nos presentan a dos personas que a simple vista podrían ser bastante arquetípicos, un príncipe casi destronado que quiere recuperar su corona aunque tenga que poner en peligro su real pellejo y a una joven que quiere olvidar su paso y forjarse una nueva vida. Pero en realidad no es así, bueno, Arthmael sí, pero se lo perdonamos porque es él. Lynne, nuestra protagonista, es una joven prostituta quien está atrapada en un burdel, pero ella quiere salir de allí y cumplir su sueño, ser mercader. Por lo tanto, su única opción es asesinar al hombre que la ha llevado hasta allí y la retiene en aquel lugar en contra de su voluntad, cuando lo hace, ella escapa.

No obstante, por casualidades de la vida, o por cortesía de los Elementos, Arthmael el Príncipe de Silfos y Lynne, se encuentran y comienzan un viaje que se quedará marcado a fuego en sus vidas.

Posteriormente, prácticamente al comienzo de este periplo, se les une un joven hechicero, Hazan, pero que realmente no es muy diestro para hacer hechizos con su varita, ya que en ese momento estaba convertido en una rana porque uno de sus hechizos les había salido mal.

Estos son personajes principales, pero el resto de secundarios están tan bien construidos como ellos tres.

Su viaje en un principio cada uno tiene su propósito que les une, finalmente será uno para encontrarse a sí mismos, madurar y recobrar aquella fe en uno mismo que habían perdido.

En su camino se encuentran bestias de todo tipo, las cuales aparecen en muchas historias fantásticas, que cada vez que aparecía una yo me divertía adivinando cuales eran cada una, y he decir que acerté todas (aunque también tengo bastante conocimiento sobre ese tipo de cosas), lo cual me emocionaba mucho. Fue una lástima que las autoras no añadiesen la parte de las amazonas.

Los personajes están magníficamente construidos, Arthmael es un príncipe vanidoso, orgulloso y mujeriego, pero que en realidad es valiente y de buen corazón; Lynne es una joven rota por su pasado, un poco impertinente y algo gruñona (pero en su defensa hay que decir que estaba aguantando al príncipe), pero es una joven que decide seguir sus sueños a pesar de que su pasado había sido negro y una joven muy fuerte que consigue curar esas cicatrices. Y Hazan, en su enorme tarea, de buen corazón, dulce, quien ha sido rechazado, pero no se rinde y por supuesto, adorable. (Si es que de Hazan no se puede decir cosas malas).

Los tres personajes tienen una gran evolución en el libro, pero desde mi punto de vista el que más evoluciona es Arthmael.

Poco a poco vamos descubriendo los rincones de Marabilia y podemos ver un poco más del mundo que han creado Iria y Selene, el cual es maravilloso y cruel a partes iguales, es decir, tremendamente real.

Por eso y por muchas razones que no puedo contar, porque sino sería spoiler, (como el precioso epílogo), es un libro fantástico que nos muestra la crueldad de la realidad, pero también que en lo más oscuro se puede encontrar el amor, el amor verdadero, basado en el respeto, igualdad y confianza. Por lo tanto, se merece la puntuación máxima, por ser tan diferente y real:

Ariadna.