Aunque fuera ayer estrenada Eight Days a Week: The Touring Years en España, fuimos invitadas al preestreno dos días antes de su proyección oficial, y yo personalmente no podía creer que iba a ver esta película-documental antes de tiempo. Siendo una fan de los Beatles pesada hasta la saciedad, tenía grandes expectativas al respecto de esta película. Y, a decir verdad, mis expectativas fueron cumplidas y superadas.
El documental muestra cómo fue la vida del cuarteto más famoso de la historia, en una transición de una época dorada a una situación donde ni siquiera podían escucharse a sí mismos durante sus actuaciones, y donde fueron rechazados por mucha gente por ciertas malinterpretaciones de sus declaraciones.
Hace un repaso a los discos más comerciales que compusieron, cómo se sentían las primeras veces que dejaban Inglaterra, ya fuera viajando a Hamburgo, o sobrevolando por vez primera el Atlántico hasta llegar a Estados Unidos, donde temían que su música no tendría tanto éxito como en Reino Unido.
Se habla acerca del gran papel que tuvieron personas como Brian Epstein (su mánager), donde mencionan que si no fuera por él, nunca hubieran llegado a ser en lo que se convirtieron en la sociedad occidental, y George Martin, su productor, quien les ayudaba con las grabaciones, les aconsejaba, y cuando ya vio que estaban experimentados, no les coartaba para crear lo que quisieran.
En este documental vais a ver la época más comercial y vais a oler un poquito su lado experimental (que, a decir verdad, es la etapa de los Beatles de la que estoy profundamente enamorada) con Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, del que la Rolling Stone calificó como mejor disco de la historia.
También vais a ver cómo estos cuatro chicos de Liverpool, todos de orígenes humildes, eran descarados y graciosos ante el mundo, y cómo se hicieron una familia que se apoyaba ante la presión que el mundo les hacía soportar.
No quiero decir mucho más, porque si vais a ir al cine a verla, (sólo estará en cines durante 8 días, como reza el título, también canción del album Beatles for Sale, el cuarto de los que lanzaron) tendréis una proyección inédita del concierto más multitudinario que dieron, el del Shea Stadium de Nueva York.
Si os gustan los Beatles, la música o simplemente os apetece verla, no os arrepentiréis. Yo estoy deseando volver a ver este documental...
El documental muestra cómo fue la vida del cuarteto más famoso de la historia, en una transición de una época dorada a una situación donde ni siquiera podían escucharse a sí mismos durante sus actuaciones, y donde fueron rechazados por mucha gente por ciertas malinterpretaciones de sus declaraciones.
Hace un repaso a los discos más comerciales que compusieron, cómo se sentían las primeras veces que dejaban Inglaterra, ya fuera viajando a Hamburgo, o sobrevolando por vez primera el Atlántico hasta llegar a Estados Unidos, donde temían que su música no tendría tanto éxito como en Reino Unido.
Se habla acerca del gran papel que tuvieron personas como Brian Epstein (su mánager), donde mencionan que si no fuera por él, nunca hubieran llegado a ser en lo que se convirtieron en la sociedad occidental, y George Martin, su productor, quien les ayudaba con las grabaciones, les aconsejaba, y cuando ya vio que estaban experimentados, no les coartaba para crear lo que quisieran.
En este documental vais a ver la época más comercial y vais a oler un poquito su lado experimental (que, a decir verdad, es la etapa de los Beatles de la que estoy profundamente enamorada) con Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, del que la Rolling Stone calificó como mejor disco de la historia.
También vais a ver cómo estos cuatro chicos de Liverpool, todos de orígenes humildes, eran descarados y graciosos ante el mundo, y cómo se hicieron una familia que se apoyaba ante la presión que el mundo les hacía soportar.
No quiero decir mucho más, porque si vais a ir al cine a verla, (sólo estará en cines durante 8 días, como reza el título, también canción del album Beatles for Sale, el cuarto de los que lanzaron) tendréis una proyección inédita del concierto más multitudinario que dieron, el del Shea Stadium de Nueva York.
Si os gustan los Beatles, la música o simplemente os apetece verla, no os arrepentiréis. Yo estoy deseando volver a ver este documental...
~ Laura B.
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